martes, 7 de octubre de 2008

El Puente

Cerré los ojos y aún miraban,miraban conectados al interior en donde la luz misma nace y se hace.Los cerré y me disponía a apagar mi cuerpo casi en su totalidad,mis músculos y huesos,hablaban con la única voz de reclamos que conocen,el sueño era evidente.Tu en cambio decidiste salir a buscar un poco de pared del puente,un puente que casi nada tenía que ver contigo,que quedaba más cerca de mi casa que de la tuya,puente grande de color cemento,que para mi poco y nada siginificaba.

Las máquinas encargadas de su sacrificio ya habían hecho grandes avances en sus costados,costados que servirían de recipiente de las muchas partes de su gran cuerpo al caer destrosadas,insististe,me pediste por favor,el puente en poco tiempo no estará mas decías,pedías un pequeño paseo,pero a mi el sueño me ganaba, y bueno dijiste,podemos ir a la playa de pasada,nos queda cerca.
Con una tristeza dura y terca mis ojos,mis músculos y mis huesos recibieron ordenes de comenzar actividades y asi fue,ya todo estaba listo,fuimos al paradero de buses y tomamos uno que pasaba al lado mismo del puente y de pasada nos dejaba en la playa.El plan era el siguiente: Dada las obras que en el puente se realizaban el bus haría una parada junto a una cola larga de distintos vehículos que esperaban pasar al igual que nosotros.Bajarías con una palita metálica,levantarías un pedazo de puente y subirías rápidamente.Perfecto dije yo,sin mayor perdida de tiempo,sería perfecto el dia de playa.El bus estaba casi vacío,solo 2 personas que parecían reclamarle sueño a las ventanas ,y nosotros.Bajaste con tus lentes marrones de sol,con la toalla a la cintura y tu ropita de baño de color celeste suave,bajaste y volviste postre el futuro.

Bajaste y mi forma de ser (que por ese entonces era bastante tonta) me impidió verte recolectando las piedritas del puente,pero te vi pasar por adelante del bus apurada,apuradiísima,con que velocidad y con que sonrisa pasaste.Sabía que querías mucho al puente por que el puente te veía pasar rumbo a mi casa,y tu sentías que al pasar por él se acababa la ruta larga y comenzaba la corta,el puente era nostalgia que te tocaba generalmente de noche cuando lo dejabas atrás y comenzaba la ruta larga.

Mientras pensaba esto el bus emprendió de nuevo su marcha y te imaginé contando tus piedritas en algun asiento de atrás,te imaginé llena de alegría con ganas de darme la sorpresa,yo me creí parte de un juego que imaginé tuyo,y en silencio y con inocencia en mi rostro espere,el hombre de los boletos sentado adelante miraba por el espejo retrovisor,miraba el pasillo,y me miraba también,establecía conexión entre tu y yo.El bus avanzó 1,2,3 cuadras y yo ya no daba más,quería verte y ver la sorpresa,el abrazo,el beso,el ''bu'',el adivina,la chompa,las hojas nuevas,etc.

Siempre arruinaba las sorpresas,siempre con la misma impaciencia,pero ya no daba más,me comprenderías,ya iban como 5 cuadras y no había escuchado la puerta volver a abrirse,y tampoco te vi pasar,era imposible,mi inocente rostro se endurecío por el acto de estupidez que había cometido,miré hacia atrás y claro que no estabas,no estabas,te habías quedado buscando piedras en el puente,quizas me gritaste que detuviera el bus para que subas,y no reaccione.
El hombre de los boletos miro hacia atrás y tampoco vio nada,me pidió silencio y que esperara hasta la próxima parada para bajar a buscarte.Se me pone la piel de gallina y la tristeza se transforma en algo espinoso,algo espinoso en mi mente,mis billones de células quieren explotar fuera de mi y,siento como rajan la piel.

El hombre de los boletos se puso nervioso con el aire que golpeó su rostro al asomarse por la ventana derecha de la parte delantera del bus,se acercó a mi como un médico a un familiar y me pidió tranquilidad,me pidio calma,que no queriá que el chofer del bus se enterara de esto que habría de confesarme.Su amiga,joven,su amiga está dando vueltas en la rueda de adelante,esta dando vueltas hace 1,2,3,4,5 cuadras
Me sujetó con mucha fuerza y me pidió tranquilidad,nuevamente repitió aquello acerca del chofer del bus,me acerqué a la ventana derecha en la parte delantera del bus y la rueda ya no estaba en su posición,vi eso y solo eso por que no queria verte,oh mi bella,mi dulce,quizás tu cuerpo ya no contenía tu alma,pero tu alma debía estar en algún lado del bus.Pare el bus,al diablo con la tranquilidad yo quería curar tus heridas,pero el futuro fue postre,y el postre desplaso al neumático derecho delantero,en su lugar había un madero grueso,cuadrado,con manchas rojas,pequeñas,gotas rojas de la que fue tu sangre,y en la base,en la base del madero cuadrado y grueso se veía un brillo líquido,una gran mancha de grasa transparente.
El calor habia convirtió el caucho en madera cudrada y gruesa,la carne se trasnformó en un recuerdo,no como pudín como antes y tampoco voy a la playa,en cambio a ti te desaparecieron junto al puente,junto a mi.