lunes, 6 de abril de 2009

La Fabula De Arnaldo

Una noche humana varias bacterias hicieron círculo alrededor de una herida fresca. Devoraban todo lo que chorreaba de la carne viva y dejaban sin tocar algunos pedazos que luego emanarían el delicioso liquido : Pus.
Arnaldo, una de las bacterias más fuerte y joven de la aldea, no se sentía conforme con su ejercicio diario y dudaba mucho de su buen estado de salud por lo que visito a un parasito enfermero proponiéndole una simbiosis, mí dulce pus por tu saber, de inmediato el parasito se adhirió a su cuello y comenzó el análisis.
Lentos pero seguros fueron los días de Arnaldo y del parasito enfermero que colgaba,ahora,como parte de su cuello.
Traqueotomía, grito el parasito una madrugada humana en que Arnaldo se encontraba salvando niños en el tobogán de lava gástrica, si si Arnaldo, traqueotomía he dicho y eso haremos, sentencio el parasito enfermero y Arnaldo pidió tiempo para poder asimilar eso de andar con un hueco en el cuerpo,es por mi bien se decía y por mi bien todo y por la traqueotomía también.

No dejes que ningún parasito se te pegue al cuello a decirte que hacer con tu vida o tu enfermedad.