domingo, 24 de mayo de 2009

El Ultimo Hermano Que Fue Chiquito

Se acercara a tu oído con un poco de hierba luisa burbujeante y gritara el nombre del norte, por donde vinieron tus antepasados.¿Adonde mirara tu rostro sin el jugo? Necesitas aprender del Doctor Tor que enseña de buena gana su arte.
La hierba luisa a su vez late en su vapor maldito y sus sonidos acoplan el silencio de mi primer domingo en Lima.
Me despierto desesperado y espero bastante antes de dormir.
Escribo por que me pone quedarme mirando la ultima palabra de algo que no se como terminara, es un viaje como de oveja, esto es nuevo y me encanta.
Yo que todo lo extraño disfruto escribir y darle respiración a las E a las Te a las I a las o y a las Zetas y verlas volar en un cielo nuevo suerte de madera de una hermosa nube. Y no digo esto por contar algo de 8 o 9 líneas en 45 minutos, por que estos 15 o 20 segundos de tus ojos oscilando en los míos fueron 15x3 para mi.
Si te llame anoche es para decirte que vuelvas pronto, que te extraño cuando veo boletos de 80.
Trae hojas de Té para el desayuno del domingo.El sábado no te veo.